Al llegar nos dieron una habitacion en la parte del sótano a la que apenas llegaba luz natural, estaba llena de humedad, muebles en mal estado y no ofrecía los servicios ofertados en la página web. Tras transmitirles nuestra decepción nos cambiaron a una habitación algo mejor.
Como puntos a favor destacaría la ubicación del hotel (sólo 10 min andando al Palacio de Buckingham y 25 min hasta el parlamento o Piccadilly), que las habitaciones tienen baño privado, la amabilidad de la chica de recepción que nos cambió la habitación y el desayuno no está mal.
Los principales contras son la mala relación calidad/precio en comparación con los hoteles en España, mantenimiento nulo (humedades en paredes, losas sueltas, enchufes rotos incluso dentro del baño, moqueta en mal estado, etc), los colchones son de muelles incomodísimos (al tumbarte te hundes completamente y se te clavan alambres por todas partes), las habitaciones son algo pequeñas y, al menos las que yo vi, no se parecían demasiado a las fotos.
Espero que este comentario ayude tanto a los posibles nuevos clientes como al hotel si es que está interesado en mejorar.