Es un hotel sencillo, pero muy limpio, la cama no es muy cómoda, pero considero que es acorde a lo que uno paga. Lo que si tiene 5 estrellas es el servicio del dueño Marco, nos atendió de maravilla, me ayudó con varias indicaciones para ir a conocer la ciudad, nos dió la habitación con baño privado (aunque es separado). En el desayuno se preocuparon por atendernos bien, el y su esposa Española, muy atentos y comida rica. Los recomiendo ampliamente, son muy buenas personas.